Es fundamental identificar el problema para darle el rumbo correcto al arreglo del electrodoméstico, porque el cambio del motor es costoso y nos hace estar un tiempo sin poder utilizar la nevera. Saber cuál es el defecto hace que nuestros esfuerzos se enfoquen en la reparación correcta y evita que gastemos en otros procesos innecesarios. Por eso, hemos separado todo lo que necesitas saber para identificar si tu nevera se ha quemado.
¿Qué sucede cuando la nevera se quema?
Comenzamos a sospechar de problemas cuando nuestro electrodoméstico empieza a no mantener el frÃo necesario en la parte interna, o hace ruidos extraños y sonidos altos cuando está conectado al enchufe. Y esto es válido para diversos productos, ya sea en modelos de nevera de 1 puerta o en los modelos más elegantes y prácticos de nevera dúplex. Sin embargo, pueden ocurrir diferentes problemas, como la falta de gas o detalles en la parte eléctrica.
Sin embargo, cuando la nevera se quema, el motor, que funciona como su corazón, se detiene y ninguna de las otras funciones puede ser realizada por el aparato. Cuando la nevera se quema, tendremos la falta de transmisión de energÃa necesaria para refrigerar y congelar alimentos, y asÃ, perdemos la función de nuestra nevera.
Cuando la nevera se quema, notarás:
- Falta de conservación del frÃo en el ambiente interno;
- Aumento de la temperatura y acumulación de olores en el refrigerador;
- Deshielo gradual y formación de agua en el congelador;
- Ruidos extraños y de esfuerzo excesivo en el motor;
- Motor sobrecalentado e interior del refrigerador a temperatura ambiente.
¿Cómo identificar si la nevera se ha quemado o no?
Para saber si el motor realmente se ha quemado, es interesante verificar otros aspectos que también causan comportamientos anormales en la nevera. Por eso, el primer paso es identificar algunos sÃntomas y comprobar que no están relacionados con el mal funcionamiento o problemas en partes especÃficas del electrodoméstico. Esto es válido para todos los modelos, desde una nevera de menor precio hasta modelos tecnológicos de nevera inversora.
Por lo tanto, debemos pasar al proceso de eliminación de algunos factores que, si están dentro de lo esperado, son responsables de asegurarnos que el problema está en el motor de nuestra nevera. A continuación, hemos separado lo que debes hacer para verificar correctamente el funcionamiento de cada una de las siguientes partes.
Termostato
Cuando notes temperaturas internas por encima de lo esperado, verifica el termostato y asegúrate de que está ajustado correctamente para tener la temperatura adecuada para la cantidad de alimentos presentes. Para ello, gÃralo y observa si hay algún cambio en la nevera. Espera algunas horas para asegurarte de los cambios de temperatura.
Sello de goma
Verifica si la goma que sella la puerta. Debe permitir el cierre completo y el sellado de la(s) puerta(s), evitando el contacto entre la parte externa e interna de la nevera. Puedes comprobarlo al abrir la puerta y ver si hay alguna resistencia. Además, si la goma está reseca, presenta grietas o tiene moho, puede ser el momento de hacer el cambio.
Puedes realizar la prueba del papel para comprobar el estado de la goma en toda su extensión. Para ello, toma una hoja de papel y colócala entre la puerta y la nevera. Cierra la puerta y, al abrirla, observa si hay resistencia en el papel. Si no la hay, esta parte tiene un sellado defectuoso.
Ubicación de la nevera
También es interesante verificar si la nevera está a la distancia correcta de la pared y el techo. Debe tener en promedio 7 cm de espacio en los lados y fondo, y un poco más de 2 cm en la parte superior, para la correcta circulación de aire.
Condensador
El tubo presente en la parte trasera, junto a la rejilla, pertenece al mecanismo condensador, que convierte vapor en aire frÃo. Verifica si el ruido emitido por el motor y su funcionamiento son normales, pero aun asà la temperatura interna está alterada. Si es el caso, el tubo puede estar perforado y hay fuga de gas. Busca un técnico para resolver tu problema de forma eficiente.
También es importante verificar si la bobina del condensador está limpia. Pasa un paño seco o aspiradora en la parte trasera de la nevera cada vez que notes que está sucia y hay acumulación de residuos.
Compresor
Para verificar este elemento, desconecta la nevera y vuelve a conectarla al enchufe después de dos horas. Si el funcionamiento es normal después de ese tiempo, el compresor puede estar sobrecalentándose, sin enviar el aire al refrigerador. Prueba la continuidad del componente a través de un voltÃmetro, o llama a personal especializado que verificará cuál puede ser el problema.
Conexión con la red eléctrica
Parece lógico, pero es necesario verificar si el enchufe funciona correctamente y la nevera está conectada a una red estable. Por eso, prueba la conexión con otros electrodomésticos y verifica si funcionan normalmente. Además, procura dedicar un enchufe solo para la nevera, ya que el aparato consume más energÃa que otros electrodomésticos más pequeños.
Motor quemado
Si todos los elementos anteriores están en orden o se han solucionado posibles problemas, puedes considerar que tu motor se ha quemado. Es común que este problema se note en poco tiempo, principalmente por el sobrecalentamiento y el ruido emitido por el motor.
Sin embargo, al estar seguro de que solo puede ser el motor de la nevera el problema, llama a un servicio autorizado, que diagnosticará la gravedad del defecto. En algunos casos, es posible arreglar el motor, con el cambio de piezas especÃficas. En otros, será necesario cambiar el motor de la nevera.
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¿Qué sucede cuando se quema el termostato del refrigerador?
Podemos tener varios problemas si el termostato del refrigerador se quema. Es una pieza importante para el refrigerador, ya que controla la temperatura interna del electrodoméstico, permitiendo que el refrigerador y el congelador funcionen correctamente. Cada una de las partes debe tener valores determinados, siendo el refrigerador entre 3 y 4 grados Celsius (los compartimentos superiores llegan a 5º) y el congelador entre -15 y -18 grados Celsius.
Si el termostato tiene problemas, notarás:
- Temperatura incorrecta: el termostato regula el funcionamiento del compresor, que mantiene la temperatura interna correcta. Cuando se quema, puede quedar atascado en una posición, lo que conduce a una regulación inadecuada del entorno interior y resulta en alimentos que se estropean más rápido o hielo excesivo en el congelador. También es posible tener alimentos congelados en el refrigerador.
- Refrigerador que no se enciende o apaga: si el termostato está defectuoso, el refrigerador puede no encenderse cuando la temperatura sube o no apagarse cuando la temperatura es lo suficientemente baja. Esto solo se aplica a los refrigeradores con motor de compresión estándar, ya que los modelos de refrigerador inverter no pasan por el proceso de encendido y apagado.
- Desgaste del compresor: si el termostato no funciona correctamente, el compresor puede verse forzado a trabajar en exceso para intentar mantener la temperatura deseada. Esto puede llevar a un desgaste prematuro del compresor, que es una pieza costosa de reemplazar.
- Consumo de energÃa: si el refrigerador está funcionando continuamente debido al termostato dañado (recuerda, si no tiene tecnologÃa Inverter), esto resultará en un aumento en el consumo de energÃa eléctrica, lo que aumentará el monto de tus facturas.
- Ruidos excesivos: el termostato con problemas puede causar operaciones incorrectas del compresor, lo que genera ruidos anormales en el refrigerador.
Ante la sospecha de un termostato quemado, es recomendable llamar a un técnico especializado, quien te guiará sobre qué hacer y si el dispositivo puede repararse o necesita ser reemplazado.
¿Qué hacer cuando el refrigerador se quema?
El primer paso es verificar si, de hecho, el refrigerador se ha quemado. Esto se refiere directamente al motor del refrigerador, responsable del funcionamiento de todo el aparato. Por lo tanto, debes verificar cada uno de los pasos ya explicados, como el funcionamiento del compresor, el condensador, el termostato, el sello de la puerta y otras caracterÃsticas destacadas en el refrigerador.
Además, debes:
- Verificar la energÃa: asegúrate de que el refrigerador esté correctamente enchufado y de que no haya problemas con la red eléctrica.
- Revisar los componentes básicos: comprueba si las luces internas del refrigerador se encienden al abrir la puerta.
- Verificar fusibles y disyuntores: los fusibles asociados con el refrigerador deben funcionar correctamente y los disyuntores deben estar encendidos. Un fusible quemado o un disyuntor apagado pueden causar la interrupción del suministro de energÃa al refrigerador.
Si todo indica que el motor está quemado, es recomendable llamar a un técnico especializado en refrigeradores. Con el conocimiento y las herramientas adecuadas para este servicio, el personal autorizado podrá resolver tu problema. En este momento, es importante considerar la edad del refrigerador y el costo de las reparaciones. Muchas veces, comprar otro electrodoméstico puede ser más económico que invertir en reparaciones repetidas del motor del refrigerador.
Averigua si el refrigerador se ha quemado y resuelve tus problemas
Es fundamental verificar todos los pasos y asegurarte de que tu refrigerador se ha quemado, es decir, que el motor ya no funciona. Muchos problemas relacionados con fallas en la temperatura o mal funcionamiento están relacionados con componentes y partes especÃficas, lo que resulta en ahorros en la reparación del electrodoméstico. Si el motor está dañado, consulta con el técnico los costos de la reparación.
Un aspecto importante que debes conocer son las dimensiones de un refrigerador. Si no estás al tanto de esto, puedes encontrar estas medidas en la publicación que tenemos para ti.
Si los costos son elevados, puedes comprar un nuevo refrigerador y tener un electrodoméstico que te acompañará durante muchos años. En Mercado Libre, encontrarás varios modelos con buena relación calidad-precio, diferentes dimensiones y la última tecnologÃa para refrigeradores, congeladores y electrodomésticos en general.